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En comunicación es importante CONECTAR con el otro. Para eso existe un recurso muy poderoso: el «Storytelling». Se usa mucho en la publicidad pero también en exposiciones informativas, ventas, cuestiones organizacionales como personales. ¿De qué se trata? ahí vamos.

Estamos en clase de oratoria. Leandro tiene que exponer un tema y pensó «el cine». ¿Cómo encararlo? opción A: «el cine es el arte de crear y proyectar películas, viene de un vocablo griego que significa movimiento. Empezó en 1895 pero ha tenido muchos cambios. Mueve millones de dólares e impacta en nuestras vidas con fascinantes efectos especiales…. » opción B: Recuerdo cuando tenía siete años. Mamá me llevó por primera vez al cine. Antes pasamos por el supermercado compramos golosinas que ella puso en su cartera aunque estaba prohibido. Al principio me mareaba el lugar pero cuando se apagó la luz y empezó a sonar una música me sentí atrapado por las imágenes…. 

Está claro que la segunda opción, engancha más. Aunque no tenga definición ni datos contar una historia «capta» al oyente y lo predispone a seguir escuchando.

El vocablo inglés storytelling , en español es contar un cuento, relatar una historia. Básicamente estamos hablando de incoporar relatos, anécdotas, vivencias a la hora de transmitir CUALQUIER mensaje. Por formación creemos que es «poco serio» o va en detrimento de nuestra imagen profesional, lo cual es un error.

Las historias se recuerdan, los datos se olvidan

No importa si queremos vender, informar o concientizar, o lo que sea. Para lograr tu objetivo las palabras deben llegar. Y quedarse en el otro. NO hay nada más aburrido y facil de olvidar que una larga lista de datos, argumentos y explicaciones. Mientras que si me contás una historia ya tenés mi atención. Tengo la necesidad de saber que pasará después, y cuanta más atención presto mas percibo y más retendré. Cuando escuchamos una historia el cerebro segrega neurotransmisores. Uno es la oxitocina, relacionada con la empatía, uno de los mayores pegamentos sociales. Otro es la dopamina, ligada a la atención. Nos produce un estado de curiosidad que se colma cuando la histora se resuelve. Excitar la dopamina en los primeros segundos garantiza que nos sigan escuchando. Si lo pueden hacer las telenovelas y las series, podés hacerlo vos en tus presentaciones profesionales, en tus emails, audios de whatsapp, etc.

Si no hay relato, no hay negocio.

En las presentaciones hay que tener cuidado con el powerpoint con exceso de listas y graficos instrucciones, cálculos, esquemas, estadísticas, órdenes o hechos puros y duros. Pueden demostrar conocimiento, manejo de la información pero difícilmente conmoverán los corazones de los oyentes. Peter Guber en Storytelling para el éxito señala que

Para tener éxito, debés convencer a otro/s para que respalden tu visión sueño o causa. Tanto si desea motivar a sus ejecutivos como organizar a sus accionistas, dar forma a sus medios de comunicación, involucrar a sus clientes, obtener nuevos inversores o conseguir un empleo, tendrá que emitir una llamada inequívoca que capte la atención de sus oyentes, insufle emociones a su objetivo para que sea el de ellos, y los motive para que actúen a su favor. Tiene que llegar a sus corazones tanto como a sus mentes, ¡y esto es precisamente lo que hace el storytelling!

Libro de Peter Guber

Vos podés

Como todos somos narradores (lo que contás en una reunión, lo que posteás en redes sociales, lo que charlas en la mesa en la familia) lo bueno de esto es que cualquiera puede hacerlo. A diferencia de dictar una conferencia magistral o hacer una clase, para contar una historia no hace falta ser profesional. Hace falta conectar con el tema y elegir la anécdota que tenga relación con el mensaje a transmitir.

Ventajas de contar una historia

Fácil de recordar para el orador
Transforma lo abstracto en concreto y lo general en particular, por eso es Fácil de entender para un oyente
Más interesante
Acceso al imaginario («había una vez»)

«Cuando el público se conecta con las historias nos da permiso para entrar en su mente» Ariel Goldvarg

Si te toca hablar sobre política, religión o algún tema controvertido que la gente ya tiene una posición tomada, si vas directo al tema y enuncias tu postura es probable que se cierren y no te escuchen. Si cuentas una historia, esas barreras bajan y la gente se predispone a escucharte con atencion y no está analizando si lo que dices encaja con sus opiniones previas (lo que si sucede si expresas opiniones o datos).

¿Y ahora?¿Que esperás? Luz, cámara y…… a contar historias.

Te dejamos acá unos links de videos que recomendamos podés dejarnos vos las que te gustaron.


El poder de las historias
Las claves de una gran historia